Llega un momento en la vida en la que la ilusión de los regalos reside mas en el detalle que en el interior, dejamos de ser niños y buscamos cosas mas necesarias o caprichos, que si esa chaqueta que te lleva de calle todo el invierno, que si esos zapatos que te encantan y te sabe mal comprarte... que si ese viaje que nunca haces... que si las entradas de un musical o simplemente una foto que significa mucho para tí.

Sea como sea podemos hacer que ese regalo sea muy muy especial con un envoltorio como el de las fotos del post de hoy, cuidado hasta el más mínimo detalle y con sorpresa en el interior, seguro que no deja indiferente a nadie y sobre todo la cara de sorpresa que se llevará la persona que lo reciba NO TIENE PRECIO.

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¡Seguro que a el destinatario le encanta!

¿Que te parece esta idea para regalar?